26.11.04

Teminó mi semana de profesora



Imagen original
de alltom.

No les había contado pero esta semana que concluye la pasé como profesora universitaria. Ustedes se preguntarán ¿Cómo una mocosa de 23 años da clases en la Universidad?

Pues bien, mi jefa María (la mamá de los pollitos del staff de nuevas tecnologías) tuvo que ir a España a presentar un par de ponencias y una candidatura de mi universidad para un congreso, y me pidió que diera clase a su grupo durante su ausencia.

Palabras de aliento y aplausos a todos los profesores, que encontrar paciencia para explicar una y otra (y otra vez) lo mismo, no es cualquier cosa.

Por otro lado, ahora puedo entender porque hay gente que se dedica a esto; la sensación de enseñar algo, la cara del estudiante aburrido que se ilumina cuando finalmente logra el ejercicio, toda la energía que un salón de clases concentra en tu persona (ya sé, es muy místico).

Podría engancharme...