5.1.07

Soy torpe y tierna (siempre y cuando el que lea sea un caballero)

He tenido un par de días con mucha actividad bancaria (de personal assistant, todavía no heredo), además de las transacciones me he dado cuenta de que a los hombres les gusta la torpeza.

No estoy diciendo que les gustan tontas, porque la falta de inteligencia no tiene nada que ver con este concepto. Torpeza es no saber qué hacer con tantas bolsas en las manos, o terminar con un poquito de chocolate en la barbilla cuando comes helado.

Pues les decía, las mujeres encontramos a las torpes poco femeninas, absolutamente faltas de delicadeza y por qué no decirlo, algo brutas las pobrecitas. Y aunque yo soy bastante torpe, debo decir que cuando veo a una congénere peleando contra los palillos del sushi me parece más triste que tierno.

Pero para los hombres eso de la torpeza es otra historia. Las torpes (que tampoco las muuuuy torpes eh!) les parecemos criaturitas indefensas, vulnerables y sienten en lo más hondo de su ser una necesidad imperiosa de acudir en rescate de la damisela en desgracia. Una mujer con chocolate en la barbilla, how cute!

Así que si llegas a la caja con dos agendas abiertas, la cartera en brazo, y el ticket con el numerito de tu turno entre los dientes, ojalá te toque un caballero. Es más, hasta vale la pena "distraerte" un poquito en la fila para evitar que te atienda una señorita, y acompañar tu evidente torpeza de una sonrisa coqueta para que tu ficha de depósito referenciado mal cumplimentada sea encantadora.

Dichas del "sexo débil"!