Mujeres en la política: observaciones recientes

Desde hace un par de semanas veo a Geena Davis representar el rol de la primera presidenta de los Estados Unidos. La serie se llama Commander in Chief.

El argumento se desarrolla más o menos así: Mackenzie Allen (Davis) es la vicepresidenta de EEUU (elegida como parte de una argucia política para ganar votos). Durante la administración, el presidente enferma de cancer y se somete a una cirugía para remover el tumor. Temiendo su muerte, el presidente le pide que renuncie al cargo, ya que de morir, ella ocuparía su lugar.

Ella se niega y al fallecer, se convierte en la primera presidenta. La serie muestra como Mackenzie se desenvuelve en el mundo de la política y en su vida personal. La razón por la que la historia me gusta es que el personaje de Davis es una mujer bien plantada, no un títere pero tampoco masculinizada.

La idea de que una mujer no deba comprometer su naturaleza para ser exitosa en un terreno tradicionalmente reservado a los hombres me parece inspiradora. No es una Margaret Thatcher (el sobrenombre la dama de hierro no era de gratis) ni una Imelda Marcos, ridiculizada por su enorme colección de zapatos.

En la historia de América Latina ya han existido varias presidentas: Lydia Gueiler en Bolivia, Estela Martinez en Argentina, Mireya Moscoso en Panama, Violeta Chamorro en Nicaragua son las que recuerdo. Unas con más éxito que otras, pero presidentas al fin y al cabo.

Durante estos últimos meses he visto más mujeres en la política (aclaro, no es estudio formal). Angela Merker, la primera canciller alemana, fue elegida en noviembre de 2005. Hace unas horas, Chile también escogió su primera presidenta, Michelle Bachelet.

En México, 2006 es año presidencial. El miércoles el Instituto Federal Electoral decidirá si acepta la candidatura de Patricia Mercado o la de Víctor González (mejor conocido como el dr. Simi) por el partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina después de que las dos corrientes del partido presentaran a Mercado y a González como candidatos a la presidencia de la república. También Elba Esther Gordillo (en mi opinión una persona cuestionable) presentará su candidatura con el partido Nueva Alianza.

¿Para cuando una mujer en Los Pinos? Lo digo con tristeza, mejor espero sentada.