Me he cambiado de casa más de 20 veces en mi vida, he llegado a pensar que la mudanza es parecido a hacer una maleta.
Aún así, me mata de flojera meter libros, ropa y demás chucherías en cajas para encontrarles un nuevo lugar.
Se trata también de hacer una revisión de todas las cosas que es mejor tirar a la basura que empacar.
Otra cosa latosa es el cambio de rumbo y de costumbres. Dejo el departamento feo, pero práctico y céntrico, que era el centro de operaciones para la vida nocturna. No más lunes de jazz y salidas espontáneas a las once de la noche.
Ahora me voy a vivir a una casa bonita que está, citando a Buzz Lightyear, al infinito y más allá.
La que está feliz es Bisou, que por primera vez vivirá en una casa con jardín.
A hacer limonada!
17.12.05
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